lunes, 26 de abril de 2010

DIOS HABLA A TRAVÉS DE LAS MATEMATICAS.

En repetidas ocasiones se nos ha señalado que el Creador se expresa a través de las matemáticas, y que ellas, son una inestimable herramienta para entender la grandeza de sus obras. Hemos visto cadenas y largas transmisiones por los medios audiovisuales donde a través de cálculos numéricos, se nos intenta presentar la “obra revolucionaria” como sin parangón y fantástica. En las últimas semanas se nos han mostrado los números de la pobreza y la pobreza extrema mediante una serie histórica, que malintencionadamente se explica a partir del año 96, mostrando un valor pico de 70% de pobreza en el país, dejando de lado que al entregar la 4ta república el poder a finales del 98, se había reducido a 55%. Algo similar ocurría con la pobreza extrema que se entregó alrededor del 25%, pero los números de la revolución no se verían tan grandes o impresionantes sin esas “pequeñas omisiones”, a través de las cuales quiere expresarse la deidad revolucionaria.
Construir y encaminar un país por la senda del progreso es una cuestión de unir, de sumar voluntades y esfuerzos, de complementar unos programas con otros, pero nunca de restar o dividir como objetivamente lo evidencian los esfuerzos y resultados en el sector salud de las políticas oficiales. Si bien es cierto que la red barrio adentro ha traído beneficios a la ciudadanía, no deja de ser cierto que abandonar la infraestructura existente conformada por hospitales, ambulatorios y el seguro social, ha traído malestares y desasosiego a esa misma ciudadanía, dando un resultado neto muchísimo menor al esperado o cacareado por los rojitos. Puestos en una encrucijada entre escoger una opción u otra, la más beneficiosa para el país era coordinar armónicamente el desarrollo de barrio adentro, con la infraestructura hospitalaria dejada por los gobiernos anteriores, en lugar de sacrificar una en función de la otra, es decir pierdes hospitales y maternidades mientras se levanta barrio adentro. Acaso no es al venezolano a quien le toca padecer las calamidades en el área de salud por un capricho de explotar políticamente la situación. Si a eso se une la fuga de talento personificada en la migración de profesionales médicos de alta valía, la perdida de esfuerzos en su formación y experticia, así como el trato preferencial hacia profesionales de otras nacionalidades, los cuales, según información suministrada extraoficialmente son compensados gracias a un convenio que suministra 112000 barriles diarios de petróleo a Cuba, que se traduce en el lenguaje de DIOS a $ 7840 al mes por cada uno de los 30000 médicos cubanos presentes en el país. Si esa cantidad la dividiéramos a la mitad, tendríamos $ 3920 para c/u de los 30000 médicos y una diferencia de $ 117600000 al mes para adquisición de insumos o mantenimiento de equipos. Por que los médicos venezolanos son tratados en forma desventajosa comparado a lo que se ofrece a los profesionales cubiches? Cualquier egresado de las misiones educativas del gobierno puede echar esos números y razonar la veracidad de la demagógica manipulación de la igualdad. En forma más ilustrativa, considerando los 112000 barriles diarios como cifra correcta (hasta ahora no han sido desmentidos ni por las autoridades rojas ni por las cubanas) se estaría hablando de 3.73 barriles de petróleo al día por cada médico cubano, lo cual al precio de mercado cercano a $ 70 por barril, se traduce en $261.33 día por cada médico cubano en el país. Cuantos profesionales venezolanos de la medicina u otras profesiones en el sector público logran disfrutar de un ingreso similar?
Siguiendo con el idioma de Dios, imaginemos por un momento la cantidad de horas hombre que se acumulan (considerando todas las autoridades y personas allí sentadas aplaudiendo) en las cadenas y transmisiones informativas oficiales por los medios de comunicación audiovisuales durante estos 11 años. Pensemos ahora si por cada hora de transmisión se hubieran hecho 10 Km. de vialidad como estarían nuestras, calles, avenidas y autopistas. Nuevamente, a pesar de la cacareada predica del poder popular y la contraloría social, el ciudadano común no dispone de las herramientas y cifras suficientes como para realizar ese cálculo. Intentemos aproximarnos través de una muestra representativa estimada por el número de programas dominicales 380, su duración promedio 3.5 horas y una asistencia promedio de 150 personas, lo cual arroja 57525 horas hombre por la medida pequeña, ya que se están utilizando datos conservadores como le gusta al gobierno. Cualquiera que haya levantado una pared o muro en su casa, sabe que 2 personas en una jornada de 9 horas hacen una pared de 20 m de largo por 2 m de alto, o sea 40 m2 de construcción. Una simple regla de 3, de la que les gusta usar a cierto mandatario, permite estimar que durante el tiempo de los programas dominicales se han podido levantar 255666.66 m2 de pared. Los datos pudieran tener sus imprecisiones, pero lo importante es la metodología que pudiera arrojar luces para explicar la pobre gestión en la construcción de viviendas. Se pudieran incluso hacer cálculos estimando que porcentaje representan los programas dominicales del total de las transmisiones oficiales (15%, 30%, 50%, más?) Lo importante es despertar la curiosidad en la población para que pase de la escucha pasiva e hipnótica, al análisis activo y proactivo de su realidad, mediante comparaciones y cálculos usando el lenguaje de Dios para evaluar y hacerse una idea confiable, de cómo se están manejando los recursos de todos los venezolanos. Con esas horas hombre cuantas vacas se hubieran ordeñado?, cuántas hectáreas se hubieran sembrado?, cuantas hectáreas se hubieran cosechado?, Cuantas casas se han podido pintar?, cuantos computadores hubiera hecho la VIT?, cuantos carros o tractores ensamblaría Venirauto? Cuantos celulares vergatarios se hubieran fabricado?, etc. Bastaría con dejar de imitar a Daniel Sarcos, a Don Francisco o a Renny Ottolina (qepd) haciendo cada quien lo que debe hacer para que se obtuvieran mejores resultados. En pocas palabras, el gobierno que se jacta de educar a su pueblo mediante sus transmisiones, tiene a la gran mayoría de los ciudadanos embobados en un limbo donde no tienen la menor idea de cómo contribuyen o en que magnitud aportan a la riqueza nacional las empresas del estado, considerando que se justificaron en virtud de la utilidad pública. En la última transmisión dominical se mencionó que un toro manejado con las nuevas tecnologías puede llegar a tener 15000 descendientes en 10 años, es decir 1500 anuales. Si el proyecto de La Marqueseña ya tiene varios años, cuando es que se le van a presentar a los venezolanos aunque sea 800 a 1000 descendientes de un mismo toro, para tener una idea del avance de ese plan. Hablar generalidades sobre que nacieron unos becerros no permite darle dimensión a la eficiencia o éxito del proyecto.
Finalmente, dos consideraciones para cerrar. La primera anunciada en ese mismo programa sobre el incremento salarial de 40% para los garantes de la seguridad de la nación, lo cual abre la puerta a la especulación de si habrá una sorpresa preparada para el 1ro de mayo, con un incremento general de salarios de la misma magnitud, lo que a su vez caería como anillo al dedo a la estrategia política para dominar la AN, si se toma en cuenta que estarían recién elegidos los candidatos de su tolda política y se avecina el inicio de campaña. La otra se refiere a los efectos negativos de la reelección indefinida sobre la eficiencia y calidad de gestión de los gobernantes, así como el entramado de los vínculos afectivos. Quien tiene un período que en términos del lenguaje de Dios se puede llamar finito, debe optar por desarrollar su propuesta política de la manera más rápida y eficiente posible; mientras que él que siente que cuenta con tiempo ilimitado, siempre piensa que va a conseguir una nueva oportunidad, que puede dejar cosas para después o que puede hacer las cosas “flojeando” porque apelando a su carisma y el vínculo afectivo, sacará provecho de la buena voluntad de los venezolanos para conseguir esa nueva oportunidad. Cada quien tiene la decisión en sus manos para definir cual camino tomar el de la esposa mantenida y dependiente engañada o el de la independencia, progreso y libertad.

martes, 20 de abril de 2010

HACIA QUE IGUALDAD VAMOS?

La igualdad como valor universal es una meta perseguida por todas las sociedades para garantizar el acceso a la justicia, a los servicios públicos, a las oportunidades de empleo y educación, así como a los derechos y deberes consagrados en la carta magna. Sin embargo, hay una consideración, tal vez semántica sobre el asunto, que radica en definir si vamos hacia una igualación de los ciudadanos hacia arriba, es decir mejorando sus condiciones y calidad de vida o es una igualación hacia abajo, donde se deteriora la calidad de vida de un grupo poblacional en beneficio del otro. Desde este último punto de vista pudiera pensarse incluso, si vamos hacia una igualdad con la tan cacareada 4ta. República, donde unos eran más iguales que otros y en la cual ciertos “grupos favoritos” gozaban de privilegios y derechos inaccesibles negados al ciudadano común. Ya han pasado 11 años y todavía se observan groseras diferencias entre los paquetes salariales de los altos cargos públicos y el salario mínimo del mortal común. Igualmente ocurre, o al menos es la sensación que se percibe, con ciertos funcionarios que van de un cargo a otro, acumulan cargos y responsabilidades, forman parte de juntas directivas de organismos e instituciones y adicionalmente les solicitan informes e investigaciones. Lo cual obliga cuando menos a preguntarse, si todos somos iguales como es que unos tienen tantas atribuciones y tareas y otros andan desempleados o en la buhonería, inventándose algo que hacer para ganarse la vida. Ni siquiera es que los resultados de los “consentidos” son relumbrantes y descollantes, por el contrario, han sido tan pálidos y escuálidos, que cualquiera pudiera haber hecho lo mismo o quizás más. Ha sido tan notorio y prominente ese proceder, que obliga a cuestionar si el mantenimiento de cierta casta política en el disfrute de los dineros públicos, negando la pregonada participación e igualdad a través de la no consideración de diferentes nombres, ideas y propuestas, no será un mecanismo para condicionar la lealtad y el compromiso con ciertas posiciones y decisiones políticas, sacrificando el interés nacional que reclama mayor capacidad realizadora y de gestión. En un comportamiento similar se desenvuelve la aplicación de justicia, dependiendo de quien la accione o active se producen las actuaciones judiciales; cuando quien denuncia o acusa está “bien conectado” la celeridad de los mecanismos de la justicia deja perplejo al más pintado y se convierte en la envidia de los sistemas judiciales más avanzados del mundo. Por el contrario, si la activa Juan Bimba la lentitud, la modorra y el achante se convierten en sus principales atributos. Ni hablar si se intenta proceder contra el estado, entonces casi desaparece y todos los trámites se hacen eternos, se convierte en un morrocoy cojo que exaspera y desanima a cualquiera. Es tan evidente esa conducta que muchos aplauden la Misión Milagro, señalando que en Venezuela hasta la justicia fue a Cuba y dejó de ser ciega, reconociendo que bajo la bandera de la libertad el estado se rebela y desconoce cualquier sanción de entes internacionales, mientras sus ciudadanos dan ejemplo de civismo aceptando modificaciones en las leyes que controlan su vida al detalle. Solo un soquete o soqueta se sometería al nuevo marco jurídico sabiendo que el estado se agarra del comodín de la soberanía y la libertad, para no acatar sus compromisos con la legislación internacional. Otra muestra evidente de la igualdad, se observa en el acceso a los medios de comunicación oficiales para denunciar irregularidades o insatisfacciones con el proceder del gobierno; difícilmente se encuentran espacios en dichos medios que son de todos los venezolanos, donde se pueda debatir o opinar libremente sobre las decisiones del poder político, mientras sobran funcionarios, voceros del partido y simpatizantes que puedan expresarse de manera privilegiada siempre y cuando le hagan coro a la propaganda oficial. Nuevamente hay que cuestionar si no debería el estado dar el ejemplo presentando paneles con opiniones diversas, que permitan balancear la información y aproximarse a la realidad.
Siguiendo con el análisis de la pretendida igualdad, no puede pasarse por alto el tratamiento que reciben y los resultados que obtienen las empresas administradas por el estado y el resto del sistema empresarial venezolano. Ahí observamos que mientras las empresas catalogadas de capitalistas y especuladoras aportan al erario público a través del pago del ISLR, hasta el momento no se tienen argumentos de cuanto aportan las llamadas empresas socialistas. Quizás son tan listas, al menos dan pie para esa sospecha, que viven a expensas del aporte de las empresas capitalistas, lo cual ineludiblemente lleva al siguiente cuestionamiento: Puede el socialismo del siglo 21 autosustentarse si destruye el capitalismo? Hasta ahora la única empresa que medianamente da la talla bajo la gestión rojita es Pdvsa y alguna que otra expropiada o confiscada, según aplique, que requieren ser evaluadas bajo la administración oficial 2-3 años, para distinguir que es cosecha de la administración anterior y que pertenece a su actual gestión. Para muestra el botón de las areperas socialistas que está recién brotado y del cual se vanagloriaba el gobierno, de que no perdía dinero con el precio de Bsf 5 c/u y había puesto al descubierto la especulación capitalista. Súbitamente sale la noticia de un aumento de las mismas a Bsf 7.50 c/u, lo cual representa un 50% sobre su precio anterior sin haber transcurrido un año desde que fueron inauguradas. Si la inflación el año anterior fue de 25.1% según las fuentes oficiales, no ha transcurrido un año desde que empezaron a trabajar y en lo que va de año la inflación no llega a 10% como se explica ese aumento del 50%? Si el gobierno ha dicho que la inflación es especulativa, porque una de sus empresas sube sus precios al público por encima de la inflación acumulada; que tipo de mensaje está tratando de enviarle al consumidor y a las empresas capitalistas sobre la igualdad con ese proceder. Quizás que las areperas socialistas comienzan a parecerse a las areperas capitalistas, o será tal vez, que hay en agenda una visita del Indepabis a las areperas socialistas para revisar la subida de precio, considerando que hasta hace poco se nos decía que no perdían dinero. Incluso, podría ser un reconocimiento tácito del efecto de la inflación, tan señalado por el sector privado pero invisible para el sector oficial. Sería impensable hablar de un error en los detallados y calculados costos de las actividades productivas que tiene el gobierno, considerando la simpleza de producir una arepa, en comparación con otras actividades como la siderúrgica, la agricultura, la cadena Éxito, Venepal, Bancos, etc. Ejemplos de contrasentidos como ese abundan, desde reclamos laborales a la AN de trabajadores despedidos que consideran sus derechos irrespetados; cosa grave, considerando que la AN hace las leyes y debería dar el ejemplo cumpliéndolas, hasta descuidos en los mantenimientos de las plantas y los planes de inversiones o descalificación de los que abandonan el Psuv como traidores y desertores, mientras se pide a los militantes de otros partidos que renuncien y se incorporen al Psuv. Serán recibidos con los brazos abiertos y premios secundarios como el aplauso de las masas o alguna palmadita en público, pero siempre tendrán a etiqueta que le ponen al que los abandona, o será sensato pensar que a ellos los catalogarán diferente por hacer lo mismo. Finalmente, el gobierno de la participación popular y de la transferencia del poder a las comunidades, dijo recientemente que era verdad que se le enviaba “algo” de petróleo a Cuba, pero no tuvo las botas, ni las insignias ni charreteras para cuantificar el monto, con lo cual obliga al ciudadano de a pie a imaginar cifras y echar cuentas para darse una idea de cuanto cuesta un médico cubano. Pensemos en 50000 barriles/d como cifra modesta (pudiera ser más considerando que la refinería cubana tenía capacidad para 100000 b/d). El sentido común indica que esa cantidad de barriles a un precio de mercado de 40$/barril, tal cual está en el presupuesto nacional de manera conservadora, representa cerca de 2028 $/mes por médico cubano en el país. Si se usa el precio actual de mercado estaríamos hablando de cerca de 3550 $/mes por médico cubano en el país. Valdría la pena preguntarse si en nombre de la cacareada igualdad, se les ha ofrecido una suma similar a los médicos venezolanos que han buscado mejores horizontes en el exterior o si incluso, los que trabajan aquí en el sector público disfrutan ese tipo de emolumentos. Si tanto se ama y adora al pueblo por que no le presentan las cuentas claras y detalladas o por que no le dan la igualdad de oportunidad con los cubanos? Esos casos son los que llevan a preguntarse de que igualdad hablamos o hacia que igualdad vamos?

domingo, 11 de abril de 2010

MAS PERDIDOS QUE ADAN EL DÍA DE LAS MADRES

Cuando se pierde el rumbo y se carece de la flexibilidad para cuestionarse uno mismo, o para escuchar al interlocutor y sopesar que de verdad, de sustancia o valor hay en sus posiciones, se hace muy difícil o cuesta arriba volver a reencontrarse con la dirección correcta de avance. Cualquier movimiento o cualquier táctica que se implemente siempre produce un desplazamiento, desafortunadamente en ese caso en la vía equivocada, lo cual, en lugar de conducir hacia la meta planteada de progreso, desarrollo y bienestar para todos, termina alejándonos de ella. En pocas palabras como rezaba la gaita aquella estábamos al borde del precipicio y dimos un paso al frente. La solución del problema de la pobreza pasa obligatoriamente por el proceso de creación de riqueza y el abatimiento de la inflación; sin creación de riqueza no hay posibilidades de satisfacer las necesidades de una población creciente, por lo que se transita aceleradamente el camino hacia la escasez de recursos, y sin derrotar la inflación siempre existirá el malestar porque el dinero no alcanza, produciéndose la perdida del poder adquisitivo de la moneda y el deterioro en la calidad de vida. La creación de riqueza está directamente vinculada a la operación rentable de las empresas, lo cual entra en contradicción con los fundamentos ideológicos de la revolución que busca combatirla, para concentrar el poderío económico en el estado y monopolizar la posibilidad de satisfacer las necesidades de la población, sacando provecho político. Si bien es cierto, que se ha golpeado duramente al sector económico privado, también es cierto que se ha destruído el empleo, el ingreso y el potencial de crear riqueza en el país. Los lemas de la explotación del hombre por el hombre, nadie manda a nadie y la rotación de las tareas dejan de lado principios fundamentales como la responsabilidad, la habilidad y la experticia. Es como si en un equipo de basket ball se pusiera al más alto de piloto, sacrificando la ventaja en los rebotes y desperdiciando la habilidad y velocidad que generalmente tienen los jugadores de menor estatura. La experiencia que pueda tener alguien para una actividad no se puede dejar de lado, pretendiendo que cualquiera puede realizarla sin que se alteren los resultados. Esos lineamientos que a todas luces van contra la naturaleza de la actividad económica de usar eficientemente los recursos creando riqueza, pueden generar “sensaciones o ilusiones temporales” de bienestar pero no van a ser perdurables en el tiempo, porque no eliminan o solucionan las causas del problema sino que conviven con ellas. El sectarismo y el dogmatismo obstinado no conducen a ningún lado, nadie puede tener la razón todo el tiempo ni las respuestas a todos los problemas; asumir que la inflación es mayoritariamente especulativa sin reconocer que las causas de la especulación, provienen de políticas y tácticas erradas de la autoridades fomentando la desconfianza con las expropiaciones, las sanciones y persecuciones de entes oficiales a la actividad productiva, la devaluación de la moneda sin medidas complementarias que estabilicen la tasa cambiaria, sistemas de costeo opacos a la ciudadanía o las trabas burocráticas para muchos trámites causadas por los horarios reducidos debido a la crisis eléctrica, es a lo menos una manipulación interesada y malintencionada de la realidad. Sin un esfuerzo conjunto del sector privado, el sector público y la población es imposible sacar al país adelante, se requiere el trabajo en equipo entre todos y eso solo se logra fomentando la confianza, actuando con justicia e imparcialidad, reconociendo errores y mediante un ejercicio de tolerancia que permita la amplitud y receptividad a las ideas de cada uno, sin defender a ultranza posiciones ideológicas. Un país dividido no puede salir adelante ni avanza al ritmo que requieren los agobiantes problemas que tenemos los venezolanos. Al igual que un equipo de fútbol, donde lo que haga la delantera depende del esfuerzo de su medio campo, su defensa y el arquero, exactamente igual ocurre con una nación; si tomamos el ejemplo del clásico español proximo a efectuarse, sería imposible que tanto el Madrid como el Barsa mantuvieran el ritmo ganador, si Guti decide no jugar con Cristiano o Sergio Ramos entorpece a Higuaín y no articula con Xavi Alonso o Marcelo. Sería imposible que Messi tuviera el nivel de juego que tiene, si Xavi o Iniesta no jugaran con él o Pedro y Dani Alves no se entendieran en el campo. El sector privado es como la delantera del equipo, los ciudadanos son la media cancha y el sector público encarnaría primordialmente el sistema defensivo y el arquero, es decir, su función es crear medidas para proteger y motivar al sector productivo para crecer y ser mas eficiente, incorporando a los ciudadanos al proceso de creación de riqueza para asegurar su distribución equitativa. Sin la articulación armónica de ellos no se puede tener un equipo ganador. Por otra parte, el uso demagógico y a conveniencia que se ha venido haciendo de la participación popular, vendiéndola como algo novedoso y la razón última de ser de la democracia con el único fin de arrebatar las posiciones políticas que la misma voluntad popular decida poner en manos de sus adversarios políticos, tal cual lo ha puesto en evidencia con las iniciativas implementadas a raíz de los resultados en las elecciones regionales. Es pertinente preguntarse por qué si el camino era desmantelar la alcaldía metropolitana y quitar competencias a las autoridades regionales no se hizo mientras estuvieron en manos oficialistas? (lo que hubiera sido menos traumático) o por qué si se quiere ceder el poder al pueblo se ignoró olímpicamente la participación popular en esos casos? La respuesta a estas interrogantes levanta muchas sospechas sobre las verdaderas intenciones tras la propuesta del poder comunal, si se analiza en profundidad, llevar el poder o toma de decisiones a un nivel colectivo no es precisamente una alfombra de pétalos de rosa, considerando las múltiples posiciones e intereses que pueden presentarse y que no siempre se van a tener situaciones de apoyo mayoritario a una de las opciones posibles. En un país con el grado de división y polarización que se pretende mantener, se van a presentar ocasiones de apoyo paritario a diferentes opciones, que pueden conducir a conflictos de magnitud importante; o se está pensando que con un líder carismático y su control absoluto del poder institucional se le puede meter el dedo en la boca al pueblo como se hizo con los resultados de las elecciones regionales? Algo similar ocurre con la crisis eléctrica, donde la pérdida del rumbo ha conducido a la improvisación, toma de decisiones apresurada y finalmente la desesperación al ver que no mejoran los pronósticos del sector, a pesar de las constantes cadenas inaugurando plantas de generación distribuída o anunciando nuevas medidas. A nivel del ciudadano común se mantienen los niveles de racionamiento, se presentan fallas inesperadas en algunas zonas, unas de mayor duración que otras y la desesperación conduce a explicaciones traídas de los cabellos y poco creíbles como el fenómeno climático, intentos de sabotaje para tapar el proyecto de purga política y últimamente el sonado caso de la iguana; o será que la situación económica está tan difícil que en este país hasta las iguanas se están comiendo un cable…que quedará para los ciudadanos. Se presume la desesperación, porque es la única forma como racionalmente se puede explicar las continuas contradicciones en que incurre el oficialismo. Para muestra el más reciente de los botones, en plena cadena nacional se anuncia que a principios de la gestión revolucionaria, se hizo un ensayo de uso de energía solar en alumbrado público que había quedado en el aire y ahora se piensa retomar. Ese comentario claramente contradice la excusa anterior de la dependencia de la hidroelectricidad y la locura de la cuarta república en el Caroní, pues reconoce que se tuvo la oportunidad de implementar una fuente alterna de energía eléctrica para aliviar al Guri y no se hizo.
En los predios de la alternativa democrática la brújula tampoco anda muy bien, pues se confunde la gimnasia con la magnesia al pretender que la unidad es respecto a nombres, lo cual es absolutamente secundario. La unidad debe ser en torno a la definición del proyecto de país y las medidas requeridas para hacerlo posible, si ese acuerdo existiese los nombres se reducen a candidatos de imagen limpia, no cuestionable de arraigo en la localidad y simpatía en la población de sus circuitos, mientras que las individualidades y egos pueden ser subordinadas a la búsqueda del bienestar nacional a través de la colaboración y apoyo a las formulas de mayor calado en el electorado. Hoy mas que nunca hay que ser conscientes de las cualidades y defectos de cada quien, para objetiva y gallardamente deponer aspiraciones en aras de consolidar los objetivos de quebrar la aplanadora roja y servil en la Asamblea Nacional. Se impone el sentido común y la asertividad para discernir que se hace un flaco servicio a la nación y el espíritu democrático imponiendo candidaturas que no “prenden” en el electorado.

jueves, 1 de abril de 2010

CON LA VARA QUE MIDAS SERÁS MEDIDO…

Si bien es cierto que la realidad es una sola, no puede negarse que puede ser vista desde diferentes ángulos y puede ser abordada desde diferentes enfoques, cada uno reflejando o mostrando una porción de esa realidad pero nunca la totalidad de la misma. Ancestralmente se ha señalado que al ser humano le está vedada la comprensión de la realidad que lo circunda, de allí la incansable búsqueda del mítico árbol de la sabiduría que ha acompañado al ser humano durante la historia. Cualquier cosa puede ser analizada desde múltiples perspectivas: desde arriba, desde abajo, desde los lados, oblicuamente, etc. Es como los planos de una construcción hay la vista de planta, las vistas laterales, las fundaciones, los planos eléctricos, los planos hidráulicos, etc. Ninguno por si solo representa la realidad como un todo y solo en su conjunto permiten aproximar la comprensión del todo, léase bien, aproximar la totalidad, es decir casi llegar a comprenderla o muy cerca de su cabal comprensión. De allí la importancia de la diversidad y la tolerancia para poder permitir la consideración de los diferentes enfoques, de las distintas ideas o las variadas interpretaciones que conducen a la aproximación de la realidad.. Jugar a ser Dios considerando nuestro único pensamiento o nuestra única versión de las cosas como la verdad absoluta, no solo es erróneo sino impráctico, porque deja muchas interpretaciones fuera del esquema de raciocinio. La historia está plagada de casos que ejemplifican los estruendosos fracasos del pensamiento único a través de la paradoja que desnuda su debilidad e inoperancia oculta tras una aparente fortaleza e invencibilidad.. Recientemente hemos visto como quienes no escuchan sugerencias, quienes se mantuvieron sordos ante todos los avisos de la desastrosa situación eléctrica que atravesaba el país, ahora son presa de pánico e improvisan toda serie de medidas inconsultas tratando de contener lo que solo la naturaleza puede contener y lo que solo la desidia permitió crear. Inexplicablemente los de verbo agresivo, los que se ufanaban de arrasar, desaparecer, aplastar y pulverizar a sus adversarios comienzan a asustarse unos a otros con la amenaza de que si pierden el poder serán arrasados, desaparecidos, aplastados o pulverizados. Dice la sabiduría popular juzga el ladrón por su condición y las Sagradas Escrituras señalan con la vara que midas serás medido, por qué entonces ese miedo súbito y repentino al veredicto popular si presuntamente han venido tomando las decisiones correctas? Quien ha despreciado las ideas de los demás, quien se ha erigido en la verdad absoluta debería estar más que confiado del juicio favorable de sus ciudadanos sobre el rumbo que se ha decidido para sus destinos. Quien en el mundo se atrevería a dudar de la exactitud de un mapa de finales del siglo 19 para guiarnos por cualquiera de las ciudades del siglo 21? Irónicamente, no el gran líder. Mas esclarecedor aún, por qué ninguna de las empresas llamadas socialistas ha podido realizar aportes económicos a los programas sociales? Todos los fondos provienen o de Pdvsa, cuya naturaleza capitalista nadie duda, bastaría comparar el costo de producción y el precio de venta así como evaluar sus principales clientes, o de empresas capitalistas expropiadas a “la forzata”. Durante cuanto tiempo las nuevas empresas expropiadas podrán seguir realizando aportes bajo la nueva filosofía que las dirige o mas asertivamente, cuanto puede durar el nuevo comunismo si llegara a lograr su objetivo de destruir al capitalismo? De donde saldrán los recursos, si se elimina la ganancia, para mantener los programas sociales que permiten a los excluídos de siempre convivir con sus problemas pero no eliminar las causas radicales de ellos? No parece necesario encontrar el árbol de la sabiduría ni comer de sus frutos para responder esas interrogantes, el nuevo comunismo nos conduce por una espiral de pobreza caracterizada por una mentalidad de escasez, donde los recursos no alcanzan para satisfacer las necesidades de una población creciente o vendrá un control a la reproducción y la natalidad?. No es descabellado pensarlo, considerando que si hay control de cambio, control de precios y control del número de bienes que pueden comprarse, se pueda controlar la reproducción y la natalidad, si lo único que por ahora se mantiene sin control es la inflación y la inseguridad. Sobre esta última se han dado explicaciones que van desde que en el pasado también habían hurtos y asesinatos hasta que es causada por “paracos”; si se votó por un cambio de gobierno era porque se quería un cambio en los resultados, por tanto no puede ser excusa que en los gobiernos previos a la 5ta. también había inseguridad. Escudarse tras la presencia de “paracos” en los barrios, es reconocer la ineficiencia del gasto en equipamiento militar que se ha ejecutado en los últimos años, con el argumento de defender la soberanía del país y no somos capaces de liberar a nuestra población del flagelo de la delincuencia común o será que las autoridades solo pueden detener “paracos” que comen cachitos y toman jugo de naranja? Hay un contrasentido tan grande entre las versiones de las autoridades y la realidad, que en lugar de tranquilizar a la ciudadanía terminan generando más sospechas, especulaciones y sobresaltos a la población. Que coherencia lógica puede tener que en pleno escándalo de presuntas vinculaciones o apoyos a organismos terroristas como la ETA, se atrape a un presunto colaborador de esa organización tratando de entrar al país por uno de sus principales aeropuertos? Nuevamente, la excusa no puede ser que si venía de no se donde o me lo mandaron para inculparme, si esa persona se arriesgó a venir hacia acá, algún tipo de presunta colaboración debe haber pensado que tenía, sino estaría corriendo un riesgo tan irracional como pensar que en pleno apogeo de la Alemania nazi de Hitler los judíos en lugar de huir de ese país buscaban ir hacia allá. El endiosamiento del líder los lleva a conductas altaneras, arrogantes y prepotentes a través de las cuales se llega al colmo de los colmos de amenazar a la población con que van a perder los programas sociales sino siguen votando por ellos. No hay nada más chocante, antipático y humillante para un venezolano, y tal vez para cualquier ciudadano, que se le trate de manipular y chantajear con prebendas y amenazas, ya que eso automáticamente desprecia su capacidad de raciocinio, de discernir, de opinar, de pensar las cuales son cualidades inherentes al ser humano per se. Aquellos que pregonan la voz del pueblo es la voz de Dios o que el pueblo es sabio en sus decisiones, ahora no pueden resistir la tentación de “ayudar” a ese pueblo a tomar sus decisiones y recurren a la amenaza y el amedrentamiento para que se amolde a su conveniencia y sus designios, arrebatándole toda oportunidad de participación libre, independiente y soberana. Solo la “nueva clase libertaria”, los nuevos grandes cacaos y los nuevos amos del valle pueden ufanarse de una conducta tan vil. Bastaría recordar, hacer un ejercicio de memoria intentando ubicar en los últimos 3-4 años si la AN se ha reunido para discutir el tema de la inseguridad o la crisis del sector eléctrico en el país. Cada cual dará la respuesta que su memoria y conciencia le dicten, al igual que podrá intentar recordar si en ese mismo lapso se dieron reuniones de apoyo a Palestina, al expresidente Zelaya, pronunciamientos sobre Honduras o se aprobaron recursos para donaciones en terceros países, las cuales no son condenables en si mismas, sino por la falta de atención a las necesidades de las poblaciones que los eligieron.
En las filas del esfuerzo unitario la falta de sentido común, de sentido de la oportunidad y del sentido del momento histórico hace que se desperdicie el tesoro de la diversidad y la tolerancia. Bastaría escuchar con atención a los otros, privilegiar la opinión de los electores que se quieren representar y dominar el afán de protagonismo para que se pudieran alcanzar acuerdos sólidos y con real opción de triunfo. Que coherencia puede tener iniciar el camino de la representación popular despreciando la opinión o preferencias de la población. Hay que agruparse tras los candidatos que mueven, emocionan y motivan al electorado, el resto debe ceder sus aspiraciones y apoyar las fórmulas unitarias.